¿Te dije que los camellos no vuelan?¡No!... ¡contame!... ¿Cuándo te enteraste? Hoy. Hoy a la tarde. ¿Pudiste verlos? Sí, sí los vi. Iban unos al lado de los otros y ninguno volaba, todos caminaban por la arena del desierto... pero ninguno volaba.¡Los viste no volar...! Casi no puedo creerte… Sí. También quería decirte que los zapatos han decidido no usar medias, que las esquinas se doblarán a sí mismas, que los perros ladrarán al revés y que te amo. Locamente.